Pinceladas y reflexiones sobre la vida cotidiana a orillas del Mediterráneo

viernes, 7 de mayo de 2010

La construcción en Israel: una paradoja más

Una de las cosas más sorprendentes de Israel, ante los ojos de quienes la visitan de vez en cuando, como de quienes vivimos aquí, es la velocidad con la que se construye. Aún si pasaron dos o tres años, entre un viaje y otro, el recién llegado comprobará rápidamente, que hay edificios o barrios enteros o centros comerciales, etc. que no estaban sobre la faz de la tierra en su anterior visita.

Quienes vivimos aquí lo notamos no sólo cuando visitamos un lugar en el que no estuvimos cierto tiempo, sino en nuestros alrededores. Sin ir más lejos, en estos días se está construyendo un nuevo centro comercial en un lugar por el que paso casi a diario. Cuando por algún motivo, el intervalo entre mis viajes se extiende por un par de días, los avances en la construcción son tan notorios que hasta yo, que por lo general ando con la mente por esferas cósmicas, me doy cuenta.

Esta característica podria llevarnos a suponer que una vez que el gobierno tomó la decisión de construir una nueva sala de emergencias, en el hospital de la ciudad de Ashkelón (a excasos kilómetros de la Franja de Gaza) que, a diferencia de la actual, va a estar protegida ante la caida de misiles, el de por sí veloz ritmo, se acelaría aún más.

Groso error. Sucede que infortunadamente, se descubrieron tumbas arcaicas en el predio destinado a la construcción de la sala de emergencia, lo que detuvo las obras de construcción hace alrededor de un año. Paradójicamente, el hecho de que el proyecto en cuestión, tiene por objetivo salvar vidas, parece preocupar a los ultra religiosos mucho menos, que el sacrilegio de las mencionadas tumbas.

Finalmente, cuando parecía que todo iba a llegar a buen puerto, después de que el gobierno había resuelto solventar el traslado de las tumbas (lo que muchos consideran que sería un despilfarro, pero ése es otro tema) para, literalmente, "lliberar" el terreno, surgió una nueva opción, que seguramente originará nuevos cuestionamientos, que implicarán una nueva postergación del vital proyecto.

Ahora dicen que lo mejor va a ser construir una sala de emergencia subterránea, cuyo techo lo constituirían, ni más ni menos, que las dichosas tumbas...
Si no fuera lúgubre, sería cómico.
Ines Weller desdeisrael@gmail.com

1 comentario:

Ahlejandro dijo...

interesantes detalles de la contemporaneidad de Israel ...